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Primer año de diseño

   El curso toma énfasis en algunas herramientas básicas como: la representación arquitectónica mediante dibujos técnicos, dibujos a mano alzada y técnicas de maqueta. Se incorporaba lo visual a través de películas para luego aplicarlo en el proyecto. Además de la recopilación de datos necesaria para comenzar un diseño. Es fundamental el investigar, leer, buscar información que te ayude a comprender mejor tu trabajo. Existe un vocabulario básico para comprender y explicar la función o concepto del diseño como: ubicar su posición, tridimensionalidad o espacio, calidez, entre otros. Entonces, ¿por qué es necesario conocer estos conceptos?, ¿qué es la arquitectura?, ¿qué adquirí de mi primer año de arquitectura?

   El arquitecto crea espacios capaces de satisfacer las necesidades, y gustos del cliente. Se comunica por medio de imágenes, lo que implica que tendrá aptitudes para la representación gráfica y volumétrica, lo cual exige práctica. Y la práctica es una de las cosas que más enfatizan en la escuela de arquitectura. Esto significa que en las escuelas de arquitectura se aplica el dibujo, a mano alzada, técnico, maquetas o con programas de computadora. Sin embargo, el uso de la tecnología no sustituye el dibujo a mano, sino que le facilita el conceptualizar un proyecto.

   Durante mi primer año de diseño comprendí que la arquitectura no solo se basaba en el diseño de un edificio si no que conlleva mucho más que solo el diseño. Los proyectos asignados durante ambos semestres aplicaban todo lo aprendido desde el primer proyecto del semestre. El primer semestre comenzó con el vano interpolado, este se basaba en la creación de un concepto con la unión de dos fotos y dibujos a mano, que funcionaran como uno solo. Luego pasamos al relieve, este debía incorporar el vano interpolado visualizándolo como un entero y no como un dibujo. Después, el recorrido espacial, el mismo debía incorporar el proyecto anterior y crear un espacio habitable con un recorrido lineal. Finalmente, un objeto de escritorio, el mismo se refería a la creación de un objeto basado en un arquitecto; en mi caso Oscar Niemayer y cree una lampara basada en la Catedral de Brasilia.

   Ya para el segundo semestre los proyectos dejaron de ser tan abstracto y comenzaron adquirir una forma más conceptual. Con el cambio de profesores se adquiere una manera distinta de visualizar los proyectos. Este fue el caso de mi segundo semestre ya que la profesora nos motivaba a intentar explorar nuestro lado artístico más que el técnico. El primer proyecto se basó en la recopilación de datos, análisis de una tiny house, esta vez me toco “Asuma House” de Tadao Ando. Para el segundo proyecto ya no era investigar una tiny house si no crear una, para su elaboración visitamos la isla de culebra para que estuviéramos conscientes del terreno en el que estaría la casa y luego escogimos una parte del site donde nos gustaría donde estuviera la casa. Luego, para el último proyecto del semestre visitamos el pueblo de Coamo y creamos una medianera en la plaza del pueblo.

   En fin, el estudiar arquitectura nos convierte en personas con capacidad de visión, organización, y planificación de un trabajo además de ser capaces de desarrollar un pensamiento lógico.  Requiere creatividad, imaginación ya que es más bien la creación de un artista que debe ser sensible a todo lo humano para poder convertirlo en obra. Pero la verdadera formación de un estudiante de arquitectura ocurre en el taller, donde se desarrollan proyectos con componentes similares a un proyecto real. Para culminar se debe tener destreza en ramas como la matemática, cultura histórica, análisis crítico, creatividad y sobre todo pasión por lo que hace.

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